El primero, Touessrok o Ile aux Cerfs (Isla de los ciervos) diseñado por Langer y considerado uno de los campos verdaderamente difíciles del mundo, lo era -difícil, digo- pero además bellísimo y en un estado de mantenimiento inmejorable. Es un campo que ocupa unas dos terceras partes de la citada Isla y se llega desde "tierra firme" (isla firme?) en un pequeño transporte marítimo (una especie de taxi) que une Mauricio con esta Isla aux Cerfs, con el club de golf así como con unas playas y otros lugares y todo entre manglares sobre un fondo de arrecife de coral que se extiende rodeando toda la isla de Mauricio internándose en el mar hasta unos 200 o 300m en algunas partes de la isla y en otros a unos pocos 50m formando una barrera natural que permite que la isla "exista" sin ser batida -y barrida- con violencia por el Indico en estado puro. Desde las playas -de bajo calado- se observa a esas distancias -a veces a 200m y otras a 50m, dependiendo de dónde te encuentres- una barrera que forma el coral con un oleaje muy intenso y desde casi todos lados oyes siempre el mar batiendo de forma intensa contra esa barrera con olas que, desde la distancia, parecen de unos 2 a 4m de altura.
El campo en verdaderamente "tricky" y el primer día me forré y perdí un saco de bolas entre los manglares que serpean por todo el campo pero conseguí saber adónde había que jugar para los siguientes días. No es un campo largo pero hay muchos hoyos en los que tienes que volar manglares de entre 100 y hasta 180m, agua por todos lados, recodos y salidas de calle que o conoces o...

El segundo campo que jugué era el Anahita de Four Seasons diseño de Ernie Els. Impresionante también. Es más un campo de "competición"; serio, largo, con un diseño técnico; las trampas perfectamente colocadas a lo largo del recorrido... Para que os hagáis una idea es un tipo de campo del estilo del Santander, en Boadilla. Muy, muy serio donde hay que "pegar" a la bola pero con precisión; te obliga a llegar a green en muchos casos con hierros largos o híbrido o incluso maderas de 2º golpe. Precioso, ancho y con un estado de mantenimiento también excelente. Greens rápidos y grandes con movimientos sutiles y hoyos terminados frente al mar verde y azul de arrecife de coral... Y para colmo, en cada rincón te encuentras macizos de flores de colores, plantas y árboles tropicales, palmeras, mangos... Buf!
Y todo a un mínimo de 25 grados y un máximo de 30 o poco más.
En fin, gratificante.
Intenté conocer otros dos campo que tenía cerca del resort; uno de ellos, al parecer, era solo para los alojados en el resort (estoy seguro de que si me hubiera empeñado podría haber conseguido entrar) pero me anunciaron un precio de 140€ por jugar y los dos estaban pinchados desde un par de días antes así que... Jugué tres veces en Touessrok y otras dos en Anahita y... palmas con las orejas. El segundo día, tras la forrada, saqué un 81 en el campo de Langer (usando el driver solo una vez, colocando bolas en su sitio... en fin, jugando con el campo) y el tercer día un par de golpes menos y en el Anahita también conseguí bajarle casi 10 golpes del primero al segundo.
En fin. Muy lejos pero recomendable.