1. Apunto la cara del putter a la izquierda. Bastante a la izquierda y de forma consistente. En putts largos, medios y cortos.
2. Como alguno meto, llego a la conclusión de que empujo la bola, con una línea de swing de dentro a fuera, y con eso compenso la desviación de la cara.
Entonces ¿qué fue primero, la gallina o el huevo?
Tras un sesudo análisis de posibles errores adicionales, y utilizando el truco de dejar caer una bola desde el ojo dominante, he verificado que no pongo los ojos sobre la bola, sino entre mis pies y la bola, a 5-6 dedos de la misma.
La deducción final es que debido a esa mala colocación, me he acostumbrado a un swing de dentro a fuera, que he compensado apuntando un poco a la izquierda, hasta el punto de que me parece que la cara está perfectamente alineada y no lo está.
Preguntas
¿Se me va la olla?
¿Mejor que me vea un médico/curandero golfístico?
¿Cómo lo corrijo (suponiendo que esté en lo cierto)?
¿Qué hago en el campo mientras lo corrijo? He pensado lo de apuntar colocado por detrás de la bola y después ponerme en el stance asegurando que la cabeza del putter no se mueve, pero es un coñazo de rutina, además de poco estética...
Que paranoias.
