Lo que queda de Mackenzie

Es ley de vida que un campo de golf sufra cambios para enfrentarse con éxito a los retos que impone el golf moderno, a causa de la excelente preparación atlética de los jugadores, las novedades en los sistemas de entrenamiento físico, técnico y mental y la revolución en el material, cuyas prestaciones mejoran sin cesar. Se ha dicho, con razón, que Augusta National es el campo de su clase que más ha cambiado a lo largo de los años. Sin embargo, Augusta National permaneció estable y sin grandes cambios durante los primeros 20 años de su historia porque Bobby Jones actuaba de guarda custodio de su esencia y principios.
Por desgracia, a Jones se le diagnosticó en 1948 una siringomielia, una enfermedad neurológica degenerativa que le obligó en los primeros años a alejarse tanto del juego como de la dirección de Augusta National y que acabaría por llevarle a una silla de ruedas. Ese alejamiento abrió la puerta a la llegada de grandes reformas. El campo actual es el resultado del trabajo, no siempre bien inspirado, de Perry Maxwell, George Cobb, Trent Jones Sr, Joe Finger, George Fazio y Tom Fazio, responsable este último de los cambios a partir de 2002. Además jugadores como Nicklaus, Horton Smith, Ben Hogan y Byron Nelson aportaron ideas que fueron adoptadas en sucesivas reformas.
No pretende ser este artículo un relato pormenorizado y exhaustivo de los cambios de Augusta National (para ello recomiendo visitar la magnífica revisión de este tema publicada por Golf Digest en su web hace unas semanas) sino que buscamos analizar esos cambios a la luz de las ideas de los diseñadores originales.
Routing
Bobby Jones y Alister Mackenzie se enfrentaron por primera vez a lo que sería Augusta National el 14 de julio de 1931, cuando recorrieron juntos el vivero de los Berckmans. De aquel paseo salió un primer planteamiento del futuro campo que se desvió muy poco de lo que acabaría por construirse. El único gran cambio fue de tipo organizativo, todo lo demás se construyó como se había planeado en ese paseo y en los dos o tres días siguientes de trabajo.
El campo se inauguró el 13 de enero de 1933 con el routing invertido. A pesar de que los primeros borradores mostraban un routing como el que conocemos hoy día, en algún momento del proceso de diseño Jones y Mackenzie decidieron que tenía sentido invertirlo, de forma que los actuales 9 segundos hoyos pasaron a ser los primeros de la vuelta. Así se jugó el primer Masters en 1934, pero durante ese torneo se dieron cuenta de que ese routing ofrecía problemas. Los entonces primeros hoyos (los actuales 10, 11 y 12) ocupaban zonas bajas que permanecían en la umbría y no recibían sol suficiente a primeras horas de la mañana para fundir el rocío y la escarcha nocturna. Ese y no otro fue el motivo para que a partir de 1935 se recuperara el routing original y el que conocemos en la actualidad.
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