
fNo sé bien donde abrir este hilo, así que si consideráis a bien moverlo, perfect.
Resulta que he vuelto a mi putter anterior (sí, ese que está infructousamente a la venta) y meto unos puros bastante importantes; estoy muy a gusto, va por la línea perfectamente, hasta el punto que le he sacado de titular, y creo que va a seguir ahí unos meses....

La cosa es que empecé a jugar con és putter (White Hot 5), que es cabezón (mallet) y con la varilla al talón; estaba contento y pateaba mas o menos bien. Con el tiempo empecé a fallar y no estar cómodo con el putter, y acabé comprándome otro putter completamente distinto: WhiteHot 2 (estrechito, pequeño), con la varilla al centro...

Pero hace un par de meses que no estoy bien y he perdido la confianza; me parece demasiado ligero y lo saco de línea

¿como puede ser que pasar de un putter a otro, tan diferentes entre sí, me dé tan buen resultado? No entender. Esto es muy raro.