A todos nos ha pasado que hemos empezado muy mal un partido y hemos conseguido cambiar el resultado final, sin saber muy bien cómo; un buen golpe,actitud,... También el caso contrario, esos días en que todo va perfecto, vamos a por nuestra mejor vuelta o vemos el torneo ganado y zas! algo se complica y sentimos que ya ni sabemos subir el palo, perdemos sensaciones y confianza y todo se va al traste en pocos hoyos.
Lo que me pasó ayer va en línea de lo que expuse en primer lugar, pero a lo bestia. Después de los pinchos de Nochebuena en la empresa, había quedado con 2 amigos para jugarnos las cañas.
Mi primera vuelta fue horrible, de la forma que en los 4 primeros hoyos creo que llevaba 1 punto stableford. Así no lo estaba pasando muy bien y ya me veía sacando la cartera y, lo que es mucho peor, aguantando el vacile consiguiente. Pero no sé qué pasó en el hoyo 10, que todo cambió radicalmente. Después de 13 puntos en la primera vuelta, todo se volvió fácil.Empezaron a caer pares y birdies como nada; todo me parecía fácil y los putts los veía dentro.
Empecé a recortar puntos a toda velocidad y llegué a los últimos hoyos con el partido ganado. En 7 hoyos llevaba 22 puntos!!!! rematé con 4 puntos en los 2 últimos hoyos para firmar 26 puntos en la media vuelta. Vaya, 39 finalmente. un poco extraño sin duda.
Nunca me había pasado un cambio tan radical y me apetecía compartirlo. Lo que está claro es que casi todo es posible remontarlo!!
Felices Fiestas!