
Pero la confianza llega y uno no sabe cómo. Pondré como ejemplo algunos hoyos:
Salida por el hoyo 5, mi primer hoyo, atpc de la casa club. Y por lo menos me alegro de que no sea el hoyo 4 porque ahí había empezado el año pasado y fue mi primera raya. La pego medio bien, medio mal pero sale a la calle (Buf veremos como va el driver). Cojo el hierro 5 y como apunto al trapo y hay viento pues se me va al rough de la izquierda de green, se queda un poco hundida. La saco y se pasa la bandera como 6 metros. Pateo y… cataclok. Par y 4 puntos. Parece que la cosa pinta bien.
El 6 se me hace muy duro pero le saco un puntito. Al 7 le saco los dos puntos y al 8 le saco un puntito. Todos remando mucho con malos golpes pero con buenos putts. Pienso, bueno el putt está, parece que no se ha ido.
Y aquí llega el hoyo 9 que me va a dar la confianza. Salgo de nuevo medio bien al centro de la calle. Pego una madera 3 regular pero corretona y me quedo a 110m. Pienso: agua a la izda. y con el viento soplando en esa dirección, chungo. Apunto al borde derecho, rezando para que me la vuelva a green el viento y que no la dé un rabazo y se me vaya fuera de límites. Pues clavado, sale por derecha y cierra, cierra bota al lado de la bandera y se queda a metro y medio

Sigo jugando mal con el driver, sin prácticamente coger calles pero recuperando bien con los hierros y el putt, 2 puntos, 3 puntos, 2 puntos, etc. Empiezo a darme cuenta que debo ir muy bien pero que el cansancio llega y que los últimos hoyos me pueden pasar factura como siempre pero…
Llego al 17 y como en el 9 apunto fuera de green con la madera 5 (viento de izda. a dcha.). Sale por la izquierda, vuela y empieza a abrir y bota en green y rueda un poco. Mis compis creen que estoy muy cerca y que hay premio. Efectivamente, tengo la bola más cercana hasta ese momento, 6m y pico (luego me lo quitarían pero es otro momento increíble del día).
Juego decente el 18. Bueno mejor que decente, salgo otra vez fatal pero recupero bien y luego meto una madera 5 desde 165 m que pasa al lado de la bandera y se va por detrás. ¿Estaré out? Pues no, la suerte está conmigo y sigo dentro del campo. Salvo el hoyo.
Llego al 1, pego un drive corto, dos rabazos infames, pero con el cuarto la pongo en green. Meto un putt de 5 metros. 3 puntacos (y después de 2 rabazos

Hoyo 2: mi mejor drive del día. Llego hasta la estaca de 150. Pego el hierro 5 y la pongo en green justo al otro lado de la bandera (en zona tres putts). Pateo reguleras y me dejo otro putt largo pero… efectivamente la vuelvo a meter. Otros 3 puntos.
Hoyo 3: comentamos la distancia cojo el hierro 8 y la dejo a unos dos- tres metros. ¿Será el mejor aproach? No, ya había pasado Vicentin y era menos. No hago el birdie por mm pero hago el par de nuevo. 3 puntos de nuevo.
Hoyo 4: Slice a la pinada. Pero ¡increíble! La encuentro y la puedo sacar a la calle. La acerco al agua. Cojo el hierro para llevarla a green pero como viene en contra cojo un palo mas pero no hay nada que hacer aquí el dios Eolo se pone en mi contra y me la tira al agua. Cojo otro palo mas, tiro otra bola y me la vuelve a enganchar. Se acabó recojo y espero que terminen mis compañeros.
Me cuento los puntos y me salen 44 puntos. ¿Cómo le habrá ido al resto? Todo el mundo reniega del viento, los greenes. A lo mejor he ganado. No me lo puedo creer. Como no lo compruebo luego Vampi me dice que son 42 puntos. ¿Habré ganado le pregunto? Pero se hace el sueco o el valenciano, jejeje.
Al final campeón de segunda y me regalan una guitarra (¿o era una paletilla?)


Bueno, menudo rollo os he soltado y eso que no me quería alargar. Gracias a todos y nos vemos en Valle del Este.