Después de cuatro meses sin jugar (y sin entrar apenas por este foro) por distintas circunstancias, hoy he vuelto a los campos en la que ha sido mi tercera partida del año y el inicio no ha podido ser mejor.
Hoyo 1 de Zaudín, salida de drive al rough de la derecha, hierro 8 a dos metros de bandera y putt que entra. Birdie para empezar y ya nada más que con eso mereció la pena la partida.
Al final he acabado con 89 golpes, cinco arriba de mi hándicap, aunque mis sensaciones han sido muy buenas hasta que entre el calor y la falta de rodaje se me acabó la gasolina sobre el hoyo 13 o así. Lo que más he notado ha sido la falta de tacto en los approachs, chips y putts largos.
Parece mentira, pero el golf ha vuelto a picarme con su veneno.
Saludos