por hole19 » Mié Jul 03, 2013 1:08 pm
Llevaba ya unos meses trabajando en distintas partes del swing. Había ido al campeonato de 4ª y sacado un aceptable 9º puesto, pero no había sentido una vuelta redonda, aunque si un par de medias vueltas en días distintos. El handicap se mantenía. Gracias al putter clónico de 2 bolas de mi mujer había mejorado bastante. Nunca hice más de 2 puts.
El otro día en Las Lomas me apunté al puntuable senior. A ver si conseguía redondear una vuelta sin grandes cagadas.
Veo la tarjeta y son 23 de HCPJ. Salgo con buena reserva de puntos. La compañía es buena, yayos como yo, conversación distendida e intrascendente.
Hoyo 1. Salida regular pero mantengo la bola en calle hasta llegar a green. Un doble bogey. Pero por el doblete son 2 puntos al morral.
Hoyo 2. Mi hoyo maldito. Par 3 de 76 mts. En los últimos años creo que la dejaba en green una de 10 veces. Hay que ser membrillo. Tenía un wedge nuevo de 52º y con ese no fallo. Par al canto y otros 3 puntitos al morral.
Dos siguientes hoyos, dos bogeys. Bien, y además en uno tengo doblete.
Los tres siguientes encadeno 3 pares, festival de puntos: 9
Hoyo 8. Par 4 corto. Cagaditas variadas. Al final termino con DB y por lo menos rasco un punto.
Hoyo 9. Otro par 4 corto. Vuelvo a mi senda y otro par con otros 3 ptos.
Los compañeros, sin malicia, me cuentan golpes y puntos. Yo nunca lo hago, no me gusta. 42 golpes y 23 puntos. Que si voy muy bien y tal. Me lo tomo a bien y no me creo que sea algo excepcional. Solo pienso en cada golpe.
Segundos nueve. Encadeno 4 bogeys. Que con dos dobletes son 10 puntos. Me veo con la hucha bien cargadita. Hay que ahorrar para el futuro.
Hoyo 14. Par 3 de 157 con todo agua para sobrevolar. Cojo la maderita 7. Me pienso que aunque vaya largo ya arreglaré con el put. No hago buen swing y me voy al agua por la izquierda. No pasa nada, allí hay estacas rojas. Todavía puedo rascar un punto. Un globito de los que me gustan y un put de 2 mts. Algo he arreglado.
Hoyo 15. Par 4 largo. HCP 2. Buena salida. Madera 5 recta sin buscar distancia. Me quedo a 5 mts. del green. Aproach y put. Par en hoyo con doblete: 4 puntos.
Los compañeros que que bien vas. Que que swing más suave, etc. Y yo tranquilo como un gorrino en la charca.
Dos bogeys seguidos con los que cumplo los puntos.
Hoyo 18. Par 5 corto. Salida a la izquierda pero no se me queda mal. Segundo golpe un H7 a colocar a calle, bien. Tercer golpe, estoy a unos 90 mts. y la bola más baja que los pies. Me voy al antegreen por la derecha. Por lo menos no estoy en el bunker frontal. Un compañero está en el mismo lugar un poco más lejos. Intenta un aproach y filazo al canto. Tomo nota, un pitch es más complicado, hay un entrate en antegreen en la línea y con un filazo le quito los empastes a los de la terraza. Estoy terminado y los nervios afloran un poco. Me voy a lo fácil, pienso que con el put a lo peor hago 6 y cumplo. Hecho.
Total vuelta de 87 golpes y 44 puntos. Media de putts 36. Bajada de HCP de 18,6 a 15,8.
Sensaciones. Haber jugado muy relajado con la sensación de no haber hecho esfuerzo. El subconsciente era el encargado del swing y el palo hacía el solito su trabajo (para eso lo he pagado). Solo buscaba un buen impacto centrado y que las manos sujetasen levemente el palo. La rutina pregolpe me quitó mucha mierda de la cabeza. Lo demás salía por si solo. Mira que es dificil mantener esa armonía sin alcohol y otras sustancia prohibidas. No se, me parece que muchas veces es lo contrario de "lo que te pide el cuerpo".