
He vivido muchos momentos en los 8 años que llevo jugando a golf, pero siceramente, creo que hay pocos momentos tan satisfactorios como este, hará un par de años ya hice un eagle desde la calle en mi club, pero no lo ví...pero verlo, ver como haces un hoyo en uno...no sabria explicar como te sientes, primero no me lo creía y luego tiré el palo al suelo, choqué los 5 con mi caddie y entre aplausos tanto de mi partido como desde otro tee desde donde lo vieron me puse como un tomate y no podia parar de reir.
Era el hoyo 2 de Valdecañas, un precioso par tres de 135 metros para mujeres con unas vistas increíbles en cuesta abajo, con agua lateral a la izquierda y por detrás, la verdad que impresiona bastante. Ya el día de entrenamiento lo hice muy bien tanto pegándole a la bandera que estaba puesta cortita como una segunda bola que me tire a las plataformas largas como prática.
Corría el primer día de competición, al haber salido por el 10, el 2 era mi hoyo 11, y venia con 8 más de campo, habiéndome comido todos mis puntos y con ganas de remontar...pusieron, como siempre en el circuito, una bandera complicada, esquinada por la derecha detrás de los bunkers a una plataforma de como mucho...6 o 7 metros de ancha, con algo brisa en contra, el palo estaba claro, lo habíamos practicado, era un hierro 8, eso si, sin viento...asiq estudiamos Gigatron y yo bien el tiro a pegar y decidimos que para ir mas sueltos cogeríamos un 7 a darle, "¿linea bandera, no?" no teniamos nada que perder, y allá que va la bola, la pego en toda la pepa y va en la linea que queríamos, pensaba que se iba a quedar muy bien para birdie, pero pegó un bote bastante duro en antegreen, ante el cual pensé "lo que me faltaba, ahora me voy al agua de detrás, menuda suerte" (que hubiera sido una verdadera injusticia, habiendomela jugado como me la jugué) pero en su pequeño recorrido de como mucho 3 metros de plataforma, toca bandera, y se mete, con mi sorpresa y alegría.
Aunque no me ha valido para clasificarme para ir a Mayakoba por dos golpecillos de nada, es el primero que veo y hago, y me le traido esa alegría para casa esperando que algún día caiga otra vez la breva
