Con este artículo quisiera remarcar algunas de las características del momento del impacto del jugador profesional y a continuación compararlo con un aficionado. Me gustaría también identificar que es lo que hace que los dos jugadores lleguen al momento del impacto de la forma que lo hacen.



Quizás lo más llamativo desde la perspectiva frontal en la comparación de los jugadores es la relación de las manos respecto al cuerpo. El profesional tiene las manos más bien delante del muslo izquierdo y como muchos aficionados en el momento del impacto este alumno las tiene más centradas o incluso alineadas con la parte interior del muslo derecho. En un estudio que leí recientemente decía que la media de los profesionales con un hierro es una inclinación hacia delante de la varilla de 4º en el momento del impacto.

¿Cuáles son las consecuencias de estas llegadas?

Pues el profesional será capaz de impartir un golpe en bajada a la bola con la cara del palo apuntando más a donde quiere enviar la bola. El aficionado al llegar con las manos más atrasadas respecto a la cabeza del palo tiende a tocar la moqueta/el césped a la derecha de la bola e impartir un golpe ligeramente en subida. Esta llegada cierra la cara y además añade grados a la cara. Convierte efectivamente su hierro 7 en un hierro 8 y hace que la cara apunte más a la izquierda. Muchos aficionados, sin darse cuenta, aprovechan esta llegada para cuadrar una cara abierta y así de esta manera consiguen enviar la bola mínimamente recta pero obviamente no es la forma más efectiva de hacerlo.

Fijaos también en la posición del hombro izquierdo, Ernie Els lo tiene más alto, consecuencia de la mayor implicación de la cadera, más rotada y más alta.

Desde la perspectiva lateral lo más destacable son los grados de rotación de los dos jugadores, cosa que precisamente hace que las manos lleguen más a la izquierda en el caso del profesional. Grant Waite está mucho más rotado, se ven casi toda la pierna izquierda, los dos glúteos, y se nota como los hombros están abiertos respecto a la línea de tiro como mínimo 25º. El aficionado está prácticamente paralelo a su línea de tiro.



La clave para poder llegar de esta forma es el grado de la implicación del cuerpo en la bajada y tiene mucho que ver con el hilo que escribí sobre la secuencia kinemática. El aficionado al tender a imprimir más velocidad con las manos y los brazos al principio de la bajada desencadena precisamente el proceso que queremos retrasar que es la alineación de la varilla con el brazo izquierdo. Las consecuencias se observan en el momento del impacto y la bola responde de una forma u otra.