En mi opinión, uno de los principales retos que le afronta al jugador amateur en el swing es poder impartir un golpe en bajada a la bola. Para poder hacerlo requiere que el cuerpo se involucre adecuadamente en la bajada para transportar la unidad de las manos y el palo suficientemente a la izquierda para llegar al momento del impacto con la varilla inclinada ligeramente hacia el objetivo y con las manos por delante de la cabeza del palo. Por una serie razones, el jugador tiende a aplicar demasiada fuerza, demasiado temprano con las manos y los brazos lo cual hace que la varilla se alinee con el brazo izquierdo antes de tiempo, haciendo difícil que las manos lleguen a la bola antes que la cabeza del palo. El reto consiste en resistir la tentación de mover el palo más con las manos y los brazos y conseguir que el cuerpo se implique más.

Hay tres factores en la bajada que determinan donde toca el césped la cabeza del palo.

La torsión aplicada con el cuerpo al bíceps izquierdo
La torsión aplicada al palo a través de los brazos, las manos y las muñecas
La ubicación del centro de rotación. Un punto que está situado donde estaría el nudo de una corbata

El jugador debe aprender a aplicar suficiente torsión al bíceps izquierdo mediante la rotación del tren inferior y el tronco en los primeros compases de la bajada para poder mantener en tacto el ángulo entre el brazo izquierdo y la varilla más tiempo.

La aplicación de la fuerza con los brazos, las manos y las muñecas debería esperarse hasta tener el brazo izquierdo paralelo al suelo, en la posición de las nueve. Conviene recordar que actúan de nueve a siete y no de once a nueve. El jugador profesional retarda la aplicación de la fuerza en las muñecas lo suficiente como para llegar con las manos por delante de la cabeza del palo. Cualquier torsión aplicada en las muñecas hace que el punto más bajo del swing se desplace a la derecha.

Cómo se observa en las fotos el jugador profesional ha activado el tren inferior en la transición lo cual hace que incluso aumente el ángulo entre el brazo izquierdo y la varilla. El jugador amateur aplica fuerza al palo a través de las manos nada más iniciarse la bajada y el ángulo entre el brazo izquierdo y la varilla se empieza a perder en seguida.

Imagen

Una subida que hace que los centros de rotación se desplacen a la derecha tendrá más dificultades para re-situarse suficientemente a la izquierda en la bajada para poder impartir un golpe en bajada a bola.

El cambio de peso, si se hace, se realiza nada más empezar la subida, y al final de la subida si se levanta el pie izquierdo, el jugador debería caerse hacia delante. La ubicación del centro de rotación es clave para determinar donde toca el suelo la cabeza del palo.


@ James Marshall

Comentarios en este hilo.