Saber cómo se mueve la columna vertebral en la subida es clave para realizar un movimiento mecánicamente correcto.
El hecho de no poder ver la columna hace que sea mucho más difícil percibir cómo realmente se mueve a lo largo de la subida.
Los cuatro elementos clave son: la inclinación hacia delante desde la cadera, la rotación, la inclinación lateral (el hombro izquierdo se acerca a la rodilla izquierda y el hombro derecho se aleja de la rodilla derecha lo largo de la subida) y por último la extensión de la parte torácica (el segmento central) de la columna (se pierde la flexión inicial de la columna a lo largo de la subida).
Este vídeo ilustra muy bien estos conceptos eintroduce un poco este artículo:
http://www.youtube.com/watch?v=8BmGit1bBGE
Los dos elementos que menos se entienden son la inclinación lateral a la izquierda y la extensión de la parte torácica de la columna.
Si la subida no contuviera estos dos elementos la cabeza del jugador acabaría sobre su rodilla derecha al final de ella y en una posición que no se observa entre los profesionales y habría mantenido su inclinación inicial hacia delante con los hombros prácticamente paralelos al suelo. Cosa que obviamente no pasa en los swings de los profesionales, cómo se observa en estas fotos.
La flexión inicial hacia delante de la parte torácica de la columna no se mantiene a lo largo de la subida. Ese aspecto redondo de los hombros en la colocación inicial se pierde a lo largo de la subida a consecuencia de la extensión de la parte torácica de la columna. El jugador no se aleja de la bola porque a la vez los oblicuos del lado izquierdo del cuerpo se contraen y tiran el hombro izquierdo hacia abajo*. Una combinación perfecta de estos dos elementos permite que el jugador se mantenga a la misma distancia de la bola que al colocarse y con la cabeza prácticamente en el mismo sitio al final de la subida. El jugador debería tener la sensación sacar pecho al final de la subida con los hombros más separados el uno del otro que al principio.
A parte del acercamiento del hombro izquierdo a la cadera izquierda, desde la perspectiva frontal hay algunos cambios que delatan lo que realmente hace la columna vertebral. Al colocarse el jugador, las cervicales están ligeramente a la derecha de la parte torácica de la columna. Sin embargo, al final de la subida esta relación ha cambiado y las cervicales (por la inclinación lateral) ahora están situadas a la izquierda de la parte torácica. Las cervicales están inclinadas efectivamente hacia el objetivo.
Si hay más inclinación lateral que extensión de la parte torácica de la columna, el jugador acabará corriendo el riesgo de realizar un pivote al revés.
Si hay más extensión de la parte torácica de la columna que inclinación lateral, el hombro izquierdo en vez de seguir bajando a lo largo de la subida empezará a subir y la cabeza acabará desplazándose a la derecha.
*El oblicuo interior conecta las costillas con la pelvis y una contracción del músculo hace que el hombro baje. Es el mismo músculo que permite que nos rasguemos la rodilla.
El hecho de no poder ver la columna hace que sea mucho más difícil percibir cómo realmente se mueve a lo largo de la subida.
Los cuatro elementos clave son: la inclinación hacia delante desde la cadera, la rotación, la inclinación lateral (el hombro izquierdo se acerca a la rodilla izquierda y el hombro derecho se aleja de la rodilla derecha lo largo de la subida) y por último la extensión de la parte torácica (el segmento central) de la columna (se pierde la flexión inicial de la columna a lo largo de la subida).
Este vídeo ilustra muy bien estos conceptos eintroduce un poco este artículo:
http://www.youtube.com/watch?v=8BmGit1bBGE
Los dos elementos que menos se entienden son la inclinación lateral a la izquierda y la extensión de la parte torácica de la columna.
Si la subida no contuviera estos dos elementos la cabeza del jugador acabaría sobre su rodilla derecha al final de ella y en una posición que no se observa entre los profesionales y habría mantenido su inclinación inicial hacia delante con los hombros prácticamente paralelos al suelo. Cosa que obviamente no pasa en los swings de los profesionales, cómo se observa en estas fotos.
La flexión inicial hacia delante de la parte torácica de la columna no se mantiene a lo largo de la subida. Ese aspecto redondo de los hombros en la colocación inicial se pierde a lo largo de la subida a consecuencia de la extensión de la parte torácica de la columna. El jugador no se aleja de la bola porque a la vez los oblicuos del lado izquierdo del cuerpo se contraen y tiran el hombro izquierdo hacia abajo*. Una combinación perfecta de estos dos elementos permite que el jugador se mantenga a la misma distancia de la bola que al colocarse y con la cabeza prácticamente en el mismo sitio al final de la subida. El jugador debería tener la sensación sacar pecho al final de la subida con los hombros más separados el uno del otro que al principio.
A parte del acercamiento del hombro izquierdo a la cadera izquierda, desde la perspectiva frontal hay algunos cambios que delatan lo que realmente hace la columna vertebral. Al colocarse el jugador, las cervicales están ligeramente a la derecha de la parte torácica de la columna. Sin embargo, al final de la subida esta relación ha cambiado y las cervicales (por la inclinación lateral) ahora están situadas a la izquierda de la parte torácica. Las cervicales están inclinadas efectivamente hacia el objetivo.
Si hay más inclinación lateral que extensión de la parte torácica de la columna, el jugador acabará corriendo el riesgo de realizar un pivote al revés.
Si hay más extensión de la parte torácica de la columna que inclinación lateral, el hombro izquierdo en vez de seguir bajando a lo largo de la subida empezará a subir y la cabeza acabará desplazándose a la derecha.
*El oblicuo interior conecta las costillas con la pelvis y una contracción del músculo hace que el hombro baje. Es el mismo músculo que permite que nos rasguemos la rodilla.
@ James Marshall
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